Debido a la cantidad de horas que la población migrante de China invierte sobre las raíles, no hay estación de tren que no cuente con un florido puesto de conservas en el que hacerse con unas provisiones para el trayecto. En este país, está más que aceptado que los viajeros se monten una pequeña merendola en las mesas o bandejas plegables del vagón, lo cual supone toda una oportunidad de degusta…