Hollywood y China

China ha estado exportando cultura a través del cine desde los 70s, con las famosas películas hongkongesas de artes marciales, que tenían los peores doblajes del mundo, lo cual añadía a su encanto. Bruce Lee, Jackie Chan, Sammo Hung y Bolo Yeung se hicieron famosos en aquellos tiempos.

A partir de los 80, China le empezó a llamar poderosamente la atención a los grandes directores, y hubo películas fenomenales como El Último Emperador, de Bertolucci, y El Imperio del Sol, de Spielberg, ambas de 1987. En 1997 también Scorsese entró al ruedo, con Kundun.

Pero las películas hechas en China continental no empezaron a meterse al ‘mainstream’ sino hasta principios de los 90, cuanto sus ‘directores de la Quinta Generación’, como Zhang Yimou y Chen Kaige empezaron a darse a notar modestamente con películas como La Linterna Roja (1991) y Adiós a Mi Concubina (1993). Al mismo tiempo surgió una nueva generación de actores de acción más sofisticados – como Chow Yun-fat, Jet Li, Donnie Yen y Michelle Yeoh – que renovaron el interés setentero por héroes chinos. Y en el 2000, el cine contemporáneo chino finalmente explotó en el escenario mundial – más allá de los círculos de cinéfilos dedicados – con El Tigre y el Dragón, de Ang Lee. Desde entonces una cantidad cada vez mayor de filmes chinos llegan a las grandes salas en Occidente de forma regular.

Pero otra cosa ha pasado al mismo tiempo: el mercado chino de cinéfilos ha explotado también y es extremadamente atractivo para que los productores de todo el mundo muestren aquí sus películas. Hollywood tiene rato de haberlo notado, y en forma cada vez más conspicua, ‘adorna’ sus películas para que tengan mejor recepción con el Dragón. ¿Cómo lo hace? Una estrategia es contratando actores chinos para varios papeles, como por ejemplo Gong Li en Hannibal Rising, o Zhang Ziyi en Rush Hour 2.

Otra estrategia, más exitosa, es filmando partes de las películas en China, y muchas veces se hace una mezcla de ambas. Aquí pongo algunos ejemplos recientes de cómo Hollywood coquetea con los chinos para atraerlos a las salas a ver sus producciones:

Misión Imposible 3 (2006) 

Tom Cruise corre por las calles de ‘Shanghai’, que en realidad es el pueblo de Xitang, en Zhejiang. ¡Hay que hacer que China siempre se vea exótica y antigua!

Ultraviolet (2006)

Se ven los rascacielos de Pudong desde el poster promocional, aquí por lo menos la usaron como futurista.

Los Cuatro Fantásticos contra el Deslizador de Plata (2007)

Empiezan peleando sobre la Muralla China, y de un golpe aterrizan en medio de Shanghai. Reprobados en geografía.

Batman – The Dark Knight (2008) 

Volando en Hong Kong para aterrizar en un rascacielos y raptar a un contador de la mafia. ¡A Batman no le importan las jurisdicciones!

Forbidden Kingdom (2008)

¡Jet Li y Jackie Chan por primera vez juntos! ¿Qué más se puede pedir?

La Momia – Tumba del Emperador Dragón (2008)

Jet Li estuvo bastante ocupado este año. En este caso, al parecer, promoviendo Soldados de Terracota encantados.

2012 (2009)

Escondidas en Tibet, las modernas ‘Arcas de Noé’.

The Karate Kid (2010)

Olvídense de Daniel-san, esta es la nueva versión, que por alguna extraña razón no se llamó ‘Kung Fu Kid’.

Looper (2012)

Bruce Willis viaja al pasado, se encuentra a sí mismo, a su futura esposa, y huye a Shanghai.

Skyfall (2012)

James Bond siempre anda en locaciones exóticas, pero esta vez Shanghai brilló en la película: desde dragones tradicionales hasta rascacielos.

Iron Man 3 (2013)

Tony Stark se da una vuelta por Beijing para saludar a sus fans.

X Men – Days of Future Past (2014)

¡Fan Bingbing es una X-Men, wow! ¡Y se esconden en un templo en las montañas de China!

Transformers 4 – Age of Extinction (2014)

Y la reina de todas: los Transformers, los Decepticons 2.0 y hasta los Dinobots se pelean por media hora en Hong Kong, además de que Li Bingbing le patea la cabeza a un par de malandros.