La paradoja de Sudán y la inversión China

El yunque más duro es aquel que se dobla al viento. Sun Tzu

Un dicho que China tiene que aplicar día día con el caso sudanés, un ejemplo muy interesante para perfilar futuras acciones de China en el continente.

Primeramente, hablemos del Sudán, antigua colonia británica de soberanía compartida con Egipto, desde su fundación ha vivido continuas guerras civiles. En estas se han enfrentado los sudaneses islamistas del norte contra los del sur, mayoritariamente cristianos. De corte religioso y étnico, este conflicto en realidad tiene un trasfondo histórico que podría explicar durante horas, dado que previo a la colonización, había un tráfico de esclavos de los habitantes del sur gestionado por los del norte.

Tras muchos años de guerra civil, aislamiento por parte de Estados Unidos y recientes actuaciones diplomáticas chinas, se firmó el comprehensive peace agreement. Este convocaba un referéndum fechado para 2011, en el cual se votaría la independencia del Sudán del sur. Salió el sí, y nuevos problemas llegaron.

Por un lado los problemas norte-sur no se han solucionado, donde China y EEUU actúan como mediadores. Puesto que el petróleo está en el sur, pero la infraestructura para extraerlo y enviarlo a otros países está en el norte, lo cual lo deja a su merced siendo víctima de abusivas tasas. Pero esto no acaba aquí, en el sur hay diferentes etnias que luchan por el poder, en una guerra civil que hoy en día sigue generando más refugiados y muertes. Para más inri hay milicias que asaltan zonas petrolíferas atacando y secuestrado chinos, puesto que los relacionan con los intereses del Sudán del norte.

Además cabe destacar diferencias norte –sur, fácilmente ilustradas en las imágenes.

Políticos sudaneses han manifestado que sin intervenciones chinas la dura convivencia entre los dos sudanes no sería posible. Como ya mencione en mi anterior articulo esto ha llevado a algunos críticos a afirmar que rompe con la política de no intervención china, hecho que se niega desde el gobierno chino.

Queda claro que es una situación difícil de gestionar. Pero China no puede no intervenir, gran parte de la inversión es suya. A causa del aislamiento provocado por Estados Unidos China tuvo vía libre para invertir. Como podemos ver en los gráficos desde 1995 la presencia China no ha hecho más que aumentar.

A modo de orientación respecto al total africano, Sudán representó un 80% de la extracción petrolífera por partes de empresas del estado chino en 2005. Lo cual los expertos llaman, la paradoja de Sudán, puesto que recibe altos niveles de inversión cuando la seguridad es escasa.

¿Y en que se centra esta inversión? En infraestructura extractiva, sea la maquinaria que extrae petróleo, que produce energía o mejoras de carreteras y puertos, siempre destinados a la exportación. Creando pues, un país de escasa complejidad económica (último en el ranking), enfocado únicamente a la exportación.

Volviendo a los dos Sudanes, en esta imagen podemos observar como el petróleo juega un papel importante en el conflicto.

Toda la infraestructura creada se resume en este mapa, a excepción de hospitales y programas humanitarios (descritos en mi anterior post).

Gran parte de la extracción está en el sur pero no su transporte (aunque como podemos observar se proponen nuevos canales).

De todas formas la actuación china no está exenta de polémica, exporta armas a Sudán del norte, hecho que se condena desde el sur. Y además siempre estará el fantasma del neocolonialismo, en alusión al modelo de colonia extractiva, dado que es un hecho que se ha creado cierta dependencia con estas inversiones. Así como continuos condonamientos de la deuda sudanesa por parte del gobierno chino obligan a los países a concederles más privilegios.

Realmente de Sudán dependen muchas cosas, China no puede dar la espalda al norte como aliado que ha sido siempre, si lo hiciera quedaría comprometida ante otros países africanos. Por otro lado, no puede seguir con políticas que ignoren problemas internos en el país, pues esto también repercute negativamente en su ya mala fama. Ya explotada por EE.UU. para recuperar influencia en África, como podemos ver con el reciente foro que han creado imitando la FOCAC. Obviamente no hacer nada no es una opción, puesto que la extracción de petróleo ya se ha visto muy afectada y está básicamente paralizada.

Es pues momento de especulación ¿realmente se puede considerar neocolonialismo? ¿China tomara partido en los conflictos internos de los piases africanos de forma responsable? ¿O se mantendrá al margen hasta que haya alguna fatal consecuencia que les fuerce a actuar? ¿Tras la gran inversión que han hecho serán capaces de usar la fuerza si es la única solución?

Estas preguntas quedan abiertas y aún se discuten, próximamente escribiré sobre infraestructuras más concretas y su impacto.

Post editado el 27 de agosto de 2014. Gracias por el feedback.