En el nombre del padre, del hijo, de la sobrina, del nieto…

Ahora que acabo de pasar por un nuevo encuentro con la familia de mi pareja, me apetece escribir sobre asuntos de parentela. Y como este país tiene una cultura de lo más rica en este ámbito, había pensado dedicar este pequeño artículo a poner en orden los nombres dados a los diferentes miembros de la familia materna y paterna.

Sin embargo, ante el temor de que me quedara un escrito un tanto soso, he pensado ilustrar cada término de parentesco con una pequeña referencia a los familiares de mi pareja, que podrían pasar por los miembros de una familia china cualquiera, aunque eso no quiera decir que no le falte tela.

Como ya muchos sabréis, en el país de Mao y Confucio es muy importante conocer estas categorías de parentesco, o al menos tener claras las más comunes, ya que cuando uno es invitado a pasar un rato con la familia de un amigo o una relación, el hecho de dirigirse a sus padres o parientes de mayor edad haciendo uso de su nombre de pila puede resultar un gesto de lo más inapropiado.

Al contrario de como suele hacerse en los cursos de cultura china, comenzaremos esta pequeña guía práctica por el lado materno de la familia, el menos importante en una sociedad todavía muy marcada por la herencia del patriarcado, incluso para mi novia, a pesar de que su padre apenas se ha hecho cargo de ella desde que se divorció de su madre cuando sólo tenía cinco años.

LA FAMILIA MATERNA:

El abuelo o “Waigong” (外公) El abuelo materno es la figura a la que se debe más consideración y respeto dentro de este lado del tronco familiar, aunque en la China tradicional, y en muchas zonas del país todavía a día de hoy, es muy posible que éste muestre una predilección especial por sus descendientes varones, que son los que mantendrán el apellido familiar, mientras que las mujeres pasan a formar parte del linaje de sus maridos (de hecho, el carácter “wai” es el mismo usado para formar otros términos como el de “extranjero”).

En el caso de mi familia china, el abuelo materno destacó por haber abierto una zapatería en Dangyang, negocio que continuaría su hija menor, la madre de mi novia, aunque él nunca la vería prosperar ya que falleció en 1987, antes de cumplir los sesenta.

La abuela o “Waipo” (外婆) La abuela materna es la segunda figura más “honorable” de este lado de la familia, aunque, una vez más, también es probable que ella también tenga cierta preferencia por los descendientes varones del linaje al que se unió al casarse.

En nuestro caso, se trataba de una humilde campesina y comerciante de Dangyang que pasó sus últimos años de su vida en casa de mi futura suegra, la única de la familia que contaba con dinero suficiente para costear sus tratamientos médicos.

El tío o “Jiujiu” (舅舅) Los tíos maternos son figuras que, según las circunstancias, pueden resultar tan cercanos o más que los tíos paternos, ya que China es un país que poco a poco está olvidándose de las tradicionales distinciones entre linajes, y se tiende cada vez más a priorizar aspectos más prácticos como el de la distancia a la que vive cada pariente.

Cuando hay más de un tío entre los que distinguir, al mayor se le llama “Da jiujiu” o simplemente “Da jiu” (大舅 tío grande), y a los nacidos más tarde se los ordena añadiendo un número al comienzo (Er jiu 二舅, San jiu 三舅, Si jiu 四舅, etc…) mientras que al hermano más joven se le llama “Xiao jiu” (小舅) o “hermano pequeño”.

Mi novia sólo tiene un tío materno que, por lo que me han contado, es una persona a la que se le están continuamente ocurriendo todo tipo de ideas de bombero para enriquecerse. No lo he conocido todavía porque este año no ha vuelto de Zhejiang, donde trabaja como guarda de seguridad de una fábrica, aunque según me cuenta mi novia, casi es mejor que no le haya visto, porque es muy probable que me acabe liando con algún plan estrafalario para hacer realidad su particular “sueño chino”.

La tía o “Yima” (姨妈) Los términos utilizados para distinguir a las tías maternas, si es que hay más de una, siguen el mismo patrón aplicado a los tíos maternos, de modo que la tía mayor sería la “Da yima” (ojo porque también sirve como un eufemismo para referirme a la menstruación), mientras que la tía segunda sería la “Er yima” (二姨妈), aunque sólo si es más joven que la madre del sujeto de referencia, porque en caso contrario se la llamaría simplemente “Er Yi”, y así se procedería sucesivamente hasta la menor o “Xiao yi” (小姨).

La “Da Yima” de mi novia debía de ser muy guapa de joven, y además cantaba muy bien, por lo que llegó a plantearse acceder a la educación musical, aunque los ingresos de su familia no fueron suficientes para ello, por lo que, finalmente, se dedicó a las labores del campo y el comercio de sus productos caseros, igual que su madre.

Los primos o “Biao Xiondi-Jiemei” (表兄弟姐妹) Aunque tradicionalmente los primos maternos siguen siendo diferenciados por el término “biao”, hoy en día cada vez son menos los que lo aplican en toda situación, y más los que lo usan sólo cuando hay que distinguir a los primos maternos de los paternos. En cualquier caso, los términos usados se basan en las categorías de “hermano mayor” o “Biao ge” (表哥), “hermano menor” o “Biao di” (表弟), “hermana mayor” o “Biao jie” (表姐) y “hermana menor” o “Biao mei” (表妹).

En mi caso, por ejemplo, no tendría que usar la sílaba “biao” sino que pasaría a llamar a los primos de mi novia como “hermanos” o “hermanas”, aunque a los menores que yo podría llamarlos usando su nombre de pila.

A pesar de que ya he tenido más de una ocasión para conocer a los primos maternos de mi novia, lo cierto es que todavía no nos hemos visto cara a cara, porque uno de ellos apenas sale de la fábrica de zapatos en la que trabaja, otra vive en Guangxi, y la última tiene algunos problemillas mentales a los que sucumbió cuando el cabrón de su marido se fugó con otra mujer.

LA FAMILIA PATERNA:

El abuelo o “Yeye” (爷爷) El patriarca de la familia y miembro más venerable a pesar de las bromas que, más o menos cariñosamente, se le puedan hacer debido a su sordera o su visión un tanto nublosa. Cuando comemos con él, todos esperamos a que tome el primer bocado, y en ocasiones especiales es probable que se le dediquen unas palabras honrosas a su salud.

En cuanto al abuelo materno de mi novia, lo cierto es que es hombre de lo más interesante que estuvo al cargo de una división de transporte durante la Guerra de Corea, y que trabajó la mayor parte de su vida en una base aérea militar. Todavía no me cuenta muchas cosas al respecto, quizás porque aún teme que se vuelva a liar una gorda en China y cuelguen carteles de “se busca” con su foto.

Uno de los temas más delicados y que más discusiones ha causado en este encuentro provenía precisamente de la testarudez del abuelo, da más de 80 años, por seguir conduciendo el cochecito eléctrico que le compraron entre todos los hijos, aunque al final nuestro “Yeye” se ha salido con la suya gracias a su oratoria y a sentencias filosóficas sumamente convincentes del tipo: “La vida es una lucha constante con la naturaleza”.

La abuela o “Nainai” (奶奶) La abuela paterna es otra figura muy respetada dentro de la familia, sobre todo si el abuelo no se ha cuidado mucho y a llegado a la vejez sin demasiado fundamento.

En nuestro caso particular, ella me resulta una persona de lo más especial, ya que rara vez sale de su cuarto y ni siquiera en año nuevo gusta de comer en la mesa con el resto de los miembros de la familia, costumbre que también adquirió mi abuela materna, aunque más bien por estar continuamente ocupada en los fogones y las tareas del caserío.

Sin embargo, la “Nainai” de mi novia parece más bien una abuela de esas, un tanto avinagradas, a las que es casi imposible satisfacer en sus expectativas, y que se cabrean a la mínima de cambio. Pero, eso sí, cada noche su marido le ofrece una sesión de masaje de cerca de una hora, para ver si se le templa un poco el humor, supongo.

El tío o “Shushu” (叔叔) Cuando se establece un trato de cercanía o simpatía entre dos hombres de dos generaciones diferentes, no es raro que el menor sea invitado a llamar “Shushu” al mayor, igual que nuestros hijos en buena parte de Occidente pueden denominar a nuestros amigos “tío”. Además, es el término que se suele utilizar para referirse al padre de la novia o al suegro, aunque en este último caso podría llegar a usarse el termino “Baba”, si es que existe un grado muy alto de confianza y cercanía.

Sin embargo, a la hora de referirse a los tíos como hermanos del padre, se usa el término específico “Da bo” (大伯) para el mayor de ellos, mientras que a los siguientes se los denomina añadiendo la numeración al término “die” (二爹, 三爹, etc).

Mi novia tiene un tío mayor que su padre, al que ya se le nota ya cierto papel de futuro patriarca, y un tío menor que su padre que es la alegría de la huerta y una figura indispensable para mantener los encuentros bien animados. De todas maneras, los tres hermanos se han dedicado o se dedican a la música, por lo que no es raro que el canto y diferentes instrumentos musicales amenicen la comida y la sobremesa.

La tía o “Ayi” (阿姨) Con este término ocurre algo muy parecido a lo que pasa con el equivalente de nuestra categoría familiar “tío”, aunque en versión femenina. Pero a la hora de referirse a las hermanas del padre, éstas serían llamadas “Da guma” (大姑妈) en caso de ser mayores que aquél, mientras que a las más jóvenes las denominaríamos “Gugu” (姑姑), aunque también pueden ser ordenadas por edad de forma similar a los otros tíos (Ejemplo: Er guma 二姑妈).

Una vez más, me gustaría poder decir que he conocido a la tía paterna de mi novia, pero no es así, ya que ella vive en Shanghai y apenas vuelve al hogar, porque tuvo un hijo con un hombre casado y su perfil profesional no está del todo bien visto por las autoridades morales de la familia.

Los primos o “Xiongdi-Jiemei” (兄弟姐妹)Con los primos paternos ocurre algo también curioso, porque en realidad se los denomina con los mismos términos que a los hermanos y hermanas, y del mismo modo que ocurre con los términos “Shushu” y “Ayi”, también es posible que un amigo o amiga nos llame “Gege” (哥哥), “Didi” (弟弟), “Jiejie” (姐姐), o “Meimei” (妹妹) si considera que existe un grado de simpatía o amistad especial entre nosotros.

Pero en este caso, no se usa otro término específico para diferenciarlos de los hermanos, por lo que mi novia a menudo llama a su primo mayor “Gege” y a su prima, que es menor que ella, “Meimei”. No obstante, a menudo se refiere a ellos por su nombre de pila, ya que, como ocurre a muchos otros primos en China, a menudo trabajan y estudian muy lejos los unos de los otros, y apenas se ven una vez al año.

Respecto del primo de mi novia, se cuenta que es un tío bastante ligón, y que ya ha tenido unas cuantas novias en Pekín, donde estudia un máster de composición musical, proceso que podría llegar a encumbrarlo como el “nieto exitoso” de la familia en caso de alcanzar un buen puesto en la creciente industria del arte en China.

Mientras tanto, su prima, hasta hace poco universitaria, trabaja en un programa infantil de la televisión de Hubei, aunque apenas tuvimos ocasión para vernos cuando vivíamos en Wuhan, ya que tiene un novio unos cuantos años menor y en aquel entonces no le interesaba que nos enterásemos de ello y el secreto llegara a oídos de sus padres, a los que sigue sin convencerles la historia.

Como podéis apreciar, en China el parentesco constituyen todo un mundo de relaciones con un nivel de complejidad muy considerable, y eso que no me he metido a explicar cómo se llama a los tíos políticos, a los cuñados, y a muchas otras figuras familiares que no requiero en mi situación de “recién adoptado”.

Por otra parte, ya veis que cuando a alguien se le toma cariño y es invitado al ámbito más cercano de las relaciones sociales, no es raro que a esa nueva relación se le otorgue una categoría de parentesco, la cual será aplicada en función del grado de compromiso alcanzado. Cuanto más cercana la relación, más “sangre” o consanguineidad contendrá el término aplicado.

Por eso, aunque formalmente debería llamar a los primos de mi novia “hermano” y “hermana”, y ellos me tendrían que llamar también “hermano”, todavía no hemos llegado a ese extremo, ya que apenas nos conocemos. Sin embargo, sí me ha pasado que algún buen amigo más joven que yo me ha llamado “hermano mayor” en más de una ocasión ante sus familiares, demostrándoles así el fuerte nexo de unión existente entre ambos.

Al mismo tiempo, aunque mi novia apenas ve nunca a su tía paterna o “Gugu”, no duda en utilizar dicho término para referirse a la mujer que cuidó de ella cuando sus padres se separaron, sin importar la carencia de parentesco entre ellas, o el hecho de que dicha relación haya quedado enlazada al lado materno de su familia.

Bueno, yo creo que ya vale de parentela por hoy, ¿no es así? Espero que el artículo no os haya resultado demasiado confuso y que os hayáis entretenido con el esquema práctico que os he elaborado. A ver si en breve alguno tenéis la oportunidad de poner en práctica los términos empleados y me comentáis cómo os ha ido la experiencia.

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