Licenciada en empresariales y profesora de cursos de formación a profesores chinas en la Universidad de Comillas. Directora de metodología en la Macma enseñanza de chino. Desarrolla y diseña aplicaciones para el aprendizaje del chino para niños y es coautora de material escolar para niños.
-Sole, tú eres formadora de profesores en metodología para la enseñanza a los niños, cuéntanos, ¿cómo os planteáis la adquisición de gramática por parte de los niños?
-En realidad, la forma de enseñar gramática a los niños es muy diferente a la de adultos, pues los niños apenas entienden la gramática de su propio idioma, (estamos hablando de alumnos de entre 5 y 10 años de edad). Mi idea es que adquieran la gramática casi sin darse cuenta a través del ritmo, chants y las canciones. Cualquier punto gramatical por muy complicado que sea, un niño lo aprende de forma automática si le das un ritmo, los chants son muy buenos, pues son algo más lentos que las canciones y muy pegadizos, así pues, pasar de una frase de un chant, a la misma en un contexto real, les resulta muy fácil. Sin darse cuenta saben sustituir ellos solos la palabra del chant por otra distinta que gramaticalmente ocupa el mismo lugar en la frase. A ellos les parece sencillamente obvio y no preguntan. Como cuando aprendemos nuestra lengua materna de bebés, lo hacemos de forma natural. Ya que no podemos llevarles a China para que lo aprendan así de fácil, la forma más natural a la que sí tenemos acceso es que al menos que interioricen sonidos dentro de una estructura con ritmo.
Un adulto necesita razonar el porqué, tiene más memoria que un niño para estudiar gramática y darle sentido a la frase, el niño no tiene tanta memoria ni capacidad de razonar. En cambio, los niños captan los sonidos mucho mejor que un adulto, automatizan la frase (y por ende la gramática) sin necesidad de razonarlo. Por eso el ritmo se utiliza mucho, no sólo para motivarles y hacer las clases más divertidas, sino porque metodológicamente, el resultado es muy bueno.
-Muy interesante tu respuesta, el tipo de planteamiento que hacéis para los niños es aplicable a una clase de adultos. ¿Se podría de alguna forma traspasar esa manera de aprender a los adultos? Nos consta, por ejemplo, que tú aprendiste gramática china de esa forma natural, pero algunos adultos requieren de otras herramientas e incluso las exigen porque se pueden sentir perdidos.
-Absolutamente. Para un adulto la forma ideal es una combinación de ambos, yo también doy clase a adultos y siempre que tienen dificultades con alguna estructura gramatical intento inventar un ritmo, utilizo maracas en el aula, palmas, un simple bolígrafo golpeando la mesa, cualquier ritmo sencillo ayuda muchísimo a memorizar y automatizar una frase complicada.
Aprender un idioma y no tener muchas oportunidades de practicarlo nos lleva a saber leer y escribir, pero nos cuesta comunicarnos. Hablamos de forma torpe. Sin embargo cuando tienes el ritmo interiorizado, (igual que se nos quedan los estribillos de las canciones en inglés) cuando necesitas utilizar el idioma, te sale de forma automática, de forma natural.
Por otro lado, desde mi punto de vista, una vez que se tiene una base, esforzarse en deducir la gramática ayuda mucho a interiorizarla. Como todo en la vida, cuando consigues algo con esfuerzo, permanece más a largo plazo en tu memoria que si te lo explica desde el principio la profesora o que si lo lees directamente e intentas entender y memorizarlo. Los mejores resultados los he visto cuando un alumno “medio deduce” sólo el sentido de una estructura gramatical de tanto oírlo en diferentes contextos. Y después con el libro, es capaz de confirmar lo que más o menos ya intuía. Así es como aprendí yo, en la calle.
La idea es que los pequeños aprendan un poco así, un día serán mayores y querrán continuar aprendiendo chino y profundizar. Entonces confirmarán todo lo que han venido intuyendo con nuestro método.
-Comentario, reflexión libre en torno a la gramática.
-Los adultos somos más visuales que los niños y necesitamos ver, leer entender el sentido de todo, un buen libro de gramática nos da seguridad, pero no olvidemos que poder comunicarnos es el objetivo final de una lengua y para sentirse seguro hablando, además de entender lo que decimos, hay que saber automatizarlo, interiorizarlo para que salga de forma natural, el ritmo ayuda mucho.
No les expliques gramática los niños pues les estarás privando de disfrutar del encanto de la lengua china y sus misterios en la escritura.
Una idea sobre “‘I Encuentro digital de especialistas del idioma chino’: Soledad Amián”
Hola David,
te lo mando ahora mismo. Gmail va un poco mal últimamente pero supongo que en un rato lo podrás recibir.
Mucha suerte!