Aproximadamente 400 miembros del influyente Comité Central del partido se reunieron en Beijing para una sesión plenaria de cuatro días, que se lleva a cabo a puerta cerrada.
La agencia estatal de noticias Xinhua informó que Xi Jinping abrió la sesión plenaria presentando un informe de progreso y proporcionando «explicaciones de la resolución sobre logros importantes y experiencias históricas» durante los 100 años de historia del partido.
La resolución sentará las bases para el 20º Congreso del partido gobernante del próximo año, donde se espera que Xi Jinping anuncie su tercer mandato, consolidando su estatus como el líder más influyente de China después de Mao Zedong.
Los medios estatales elogiaron a Xi Jinping y su liderazgo antes de la reunión de esta semana. Xinhua dijo que el presidente era «un hombre de herencia cada vez más profunda, pero que no tiene miedo de innovar, un hombre con una visión para el futuro, totalmente comprometido con su trabajo».
Muchos consideran que Xi Jinping es el líder más influyente del país después de Mao Zedong, el fundador de la República Popular China. Desde que llegó al poder, ha tomado fuertes medidas anticorrupción, ha reprimido regiones como Xinjiang, Tíbet y Hong Kong, y ha seguido una política exterior cada vez más agresiva.
Creó un culto al poder al silenciar las críticas, eliminar a los rivales e introducir su teoría política, conocida como Los pensamientos de Xi Jinping, a escolares y estudiantes.
Xi Jinping lanzó recientemente una campaña de «bien común» para abordar la desigualdad de riqueza y fortalecer la supervisión de los gigantes comerciales locales.
Xi Jinping tiene delante su último reto
