El miércoles, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, presentó el Global Gateway, un paquete de inversión para infraestructura. El objetivo es asegurar la inversión pública y privada para hacer frente a la competencia que plantea el proyecto de la Ruta de la Seda de China.
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¿Por qué hay críticas de Europa a la nueva Ruta de la Seda de China?
El proyecto de la Ruta de la Seda de China se trata de establecer una infraestructura masiva, que se extiende a África, Asia, la región del Indo-Pacífico y también a la UE. China está invirtiendo fuertemente en ferrocarriles, puertos, carreteras y otras infraestructuras en varios países para restaurar la antigua ruta comercial a Europa.
Pero varios países europeos se han enfrentado al proyecto chino, que también ha sido calificado como una trampa de deuda oculta para los países participantes. Algo que ya ha ocurrido en otros países en desarrollo donde se incitó al endeudamiento para hacer infraestructura china. Además de que también se argumentan razones de explotación de derecho de los trabajadores y efectos ambientales.
China por su lado se defiende, mantiene que respeta la soberanía de los países y que los préstamos y proyectos son conjuntos y buenos para el desarrollo.
El desarrollo de los valores democráticos europeos
El Global Gateway tiene como objetivo movilizar hasta 300.000 millones de euros en inversión entre 2021 y 2027 vinculando los recursos de la UE, los estados miembros, las instituciones financieras europeas y las instituciones financieras nacionales.
Europa así pone sobre la mesa su proyecto y pone en manifiesto que este sí es un proyecto para mostrar el desarrollo democrático y los valores europeos.
«Queremos demostrar que un progreso democrático y basado en valores puede cumplir y estar a la altura de las necesidades locales y abordar los desafíos globales»
dijo von der Leyen en una conferencia de prensa el miércoles.
Se hizo especial hincapié en que las inversiones promoverán las prioridades de la UE, incluso en el área climática y digital, con clara referencia a China.
«Los países necesitan socios creíbles para desarrollar proyectos que sean sostenibles y sostenibles»
agregó von der Leyen
El dinero que se pondrá a disposición no provendrá de los países miembros, y el plan necesitará el apoyo financiero de instituciones internacionales y la comunidad empresarial privada para lograr los objetivos.
Clara respuesta a China
A pesar de que en el documento del proyecto no aparece ni una sola vez la palabra de China, según muchos expertos el plan de la UE es una contrapuesta clara al proyecto de la Ruta de la Seda de China.
«Global Gateway no existiría si no fuera por el proyecto de la Ruta de la Seda de China»,
dijo Andrew Small a la BBC
Este proyecto se convierte en el primer serio por parte de Europa de ofrecer una alternativa a los préstamos chinos y parece que la UE también tiene las miradas en proyectos de África.